sábado, 24 de enero de 2009

El efecto de los Lemmings

Aviso a navegantes, si has hecho un MBA o tienes intención de hacerlo, deja ya mismo de leer este blog, porque voy a ponerlos a parir, y el que avisa no es traidor.

Para empezar, y para dejarlo muuuuy clarito, no soy ni economista ni licenciado en empresariales y nada parecido, aparte de geólogo (y muy orgulloso estoy de serlo), soy un humilde consultor en innovación y mejora de procesos de negocio que no utiliza más que su experiencia y el sentido común, por lo que las blasfemias que voy a perpetrar en este post (y espero que en sucesivos) serán posiblemente muuuy ofensivos para la santa madre iglesia de la gestión empresarial.

Escribo este post después de haber asistido a una reunión Kafkiana el pasado viernes y de haber digerido el cúmulo de gilipolleces vistas en la misma. Esto me hace pensar en las burradas que se han estado cometiendo en los últimos 10 años en lo que a la gestión empresarial se refiere (al menos en lo que yo he visto) en nombre de los MBA de los cojones que parecen diseñados por Jodido Estúpido Johnson (Homenaje a Terry Pratchett).

Para empezar mi perorata (y para así dejar carnaza para posteriores post), me centro en la mayor animalada: "Empresa que no crece, muere". Parece que a algún genio se le olvida las leyes fundamentales, no sólo de la economía, sino de las matemáticas. Vamos a ver, si en un conjunto finito (léase mercado) hay un conjunto finito de elementos (léase compradores o volumen de negocio), ¿en qué cabeza cabe que existe la posibilidad del crecimiento infinito?. Sólo en aquellos melones mediocres y claramente reblandecidos por la expectativa del beneficio fácil (víctimas propiciatorias de esos timos marineros llamados "escuelas de negocios") que creen que los recursos del mercado son ilimitados.

Me llama la atención la máxima de todas las escuelas de negocio contemporáneas (y que conste que ,como pecador que soy y para mi vergüenza, he dado clase en alguna con nombre de los que aparecen en las corbatas) de que el beneficio es infinito e inmutable. Esta premisa lo que da lugar al corolario: "Una empresa bien gestionada es la que proporciona un crecimiento estable de los beneficios". Me llama poderosamente la atención de que "superdotados de la gestión" (es decir, cebollinos/as que tienen en su despacho un diploma del "bla bla instituto de bla bla de empresa bla bla") se crean la falacia de que los recursos del mercado sean infinitos y siempre crecientes.

Para no extenderme mucho y dejar un pequeño margen a la discusión (para el que quiera llamarme lo que desee), me planteo lo siguiente: Independientemente de que en el año 2009 se espere un crecimiento negativo entre el 2 al 3%, ¿como sigue habiendo capullos que esperan un crecimiento de la cifra de negocio del 10%, en vez de esperar una consolidación del negocio y tratar de cerrar el año con balance positivo? y otra pregunta ¿A qué gilipollas se la ha ocurrido la genial idea de que, en un modelo de recesión, el mantenimiento del margen de beneficio (ya no digamos la no entrada en pérdidas) es un fracaso de gestión?.

Esto me lleva a mi tesis de partida que espero desarrollar (lo siento chicos, os toca más rollo) en futuros post: Estamos en manos de gerentes suicidas que no saben gestionar más que de forma suicida porque no les han enseñado otra cosa que el lanzarse al precipicio, como los Lemmings. Es decir, en vez de analizar fríamente la situación y mantener la posición de las empresas y, lo que es fundamental, de sus trabajadores, no saben como gestionar si no es con beneficios crecientes. Así se vé lo que se vé, industria pidiendo ayudas públicas cuando sus directivos viajan en Jets privados (ya les tocará su turno, ya, en otro post en el que tenga ganas de arrear hostias).

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